1. ¿Por qué nace la Marcha Carnaval por el Agua y la Vida?

 

Este es un proceso de movilización social que surge como rechazo al proyecto minero La Colosa y en general a todos los proyectos mineros que contaminen suelos, agua, aire y pongan en riesgo el derecho colectivo a un ambiente sano. Hemos entendido que la movilización ciudadana es la principal herramienta que tenemos para defender nuestro derecho colectivo a un ambiente sano, pues lamentablemente las instituciones del estado colombiano han sido cooptadas y puestas al servicio de los intereses foráneos de las multinacionales mineras.

 

 

2. ¿Qué es la mina?

 

La Colosa es el proyecto minero a cielo abierto y lixiviación con cianuro que la multinacional Anglogold Ashanti pretende adelantar en el municipio de Cajamarca, en zonas de la Reserva Central Forestal de Colombia. Es un proyecto de magnitudes regionales que arrancaría en el municipio de Cajamarca y después se extendería a otras zonas del Tolima y el Quindío. Recordemos que la consulta popular que ganaron los habitantes de Piedras-Tolima fue en respuesta al montaje de la planta industrial y la instalación de una represa gigante en donde se depositarían las escorias resultantes de la extracción del mineral presente en los millones de toneladas de roca que pensaban llevar desde Cajamarca hasta ese municipio. 

 

La Colosa es un proyecto descomunal que puede generar impactos negativos no solamente en la dimensión ambiental sino también en las vocaciones agroalimentarias de los territorios, las dinámicas socioculturales, los procesos de autonomía y democracia local, los Derechos Humanos de las comunidades y la misma institucionalidad Colombiana. Sobre esta última hemos visto casos de corrupción, desconocimiento de la Ley y la democracia desde el gobierno nacional con el objeto de privilegiar intereses privados en contravía del interés general y el bien común.

 

Con este proyecto se va a generar pérdida de biodiversidad y coberturas vegetales (destrucción de nichos ecológicos), contaminación de suelos, agua y aire, y daños a la calidad y disponibilidad del agua. En el campo agroalimentario podemos plantear que dadas las grandes demandas de agua que se necesitan para la extracción del oro y adecuación de las actividades mineras, indudablemente se van a generar competencias y disputas con las actividades agrícolas y pecuarias. En el campo social ya se observa sobre el municipio de Cajamarca un incremento del costo de vida. En el tema político-electoral es preocupante que la multinacional financie las campañas de algunos candidatos y ponga al servicio de ellos sus programas de inversión y trabajo social. Al día de hoy ya se observa como algunos dirigentes y lideres sociales defienden a toda costa la implementación del proyecto La Colosa producto de las dádivas y beneficios que obtienen de la empresa; con ello se observa como en algunos casos se incrementa la corrupción y trafico de influencias. En el tema de los DDHH observamos como se vulnera el derecho colectivo a un ambiente sano y se incrementan los procesos de estigmatización y señalamiento de miembros de las comunidad que se oponen al proyecto minero.

 

3. ¿Cuál es la problemática que se evidencia en el Carnaval?

Esta marcha se realiza con el propósito de detener la implementación de proyectos mineros que contaminen suelos, aguas y aire; rechazar la imposición de emprendimientos mineros en cabeceras de cuencas, paramos, bosques de niebla y zonas de producción agropecuarias; exigir el respeto irrestricto por el derecho de las comunidades a implementar consultas populares que permitan la autonomía de los territorios y el ejercicio de la democracia. Entre el oro y el agua decidimos por el agua. Entre el crecimiento económico que beneficia a unos pocos hemos escogido el derecho colectivo a un ambiente sano que nos beneficia a todos.

 

La marcha carnaval le ha dado cuerpo y fuerza social a las enseñanzas de las comunidades indígenas que plantean que “no hay verde sin azul”, que hay que proteger el azul del agua para tener el verde de los bosques, para poder tener agricultura y todo aquello que nos permite sobrevivir.

 

 

4. Para usted ¿cuál es la esencia del carnaval?

 

Demostrar que la cultura de vida es superior y más poderosa que la cultura de muerte. Aprender a construir fuerza y poder social. Evidenciar que la dignidad de nuestras comunidades, que el agua y la vida, no tiene precio, valen tanto que no caben en el mundo de las mercancías, tienen que seguir siendo ratificados como derechos inalienables y fundamentales de la gente y la naturaleza.

 

Las comunidades del Tolima hemos entendido, por eso su firme convicción de defensa de los derechos de nuestra madre tierra, que su calidad de vida depende y se soporta gracias a la diversidad de bienes y servicios ecológicos que existen en nuestros territorios. La regulación hídrica, del clima y la humedad; la provisión de agua para consumo humano, agrícola y empresarial; el ciclaje de nutrientes que permiten la fertilidad de los suelos en la producción de alimentos; el control biológico de plagas y enfermedades; el sostenimiento del sistema natural de prevención de riesgos y desastres, etc. son bienes y servicios ambientales indispensables para una optima calidad de vida de las comunidades.

 

5. ¿Quiénes son los actores del carnaval y cuáles han sido sus aportes?

 

Los actores mayoritarios son los jóvenes de colegios, universidades, barras de futbol como la Revolución Vinotinto, campesinos, indígenas, profesores, sindicatos y algunos sectores empresariales y políticos.

 

6. ¿Qué es importante hacer visible desde el carnaval?

 

Que podemos ser en colectivo. La marcha carnaval evidencia que los tolimenses y colombianos podemos unirnos y trabajar por intereses compartidos, conjuntos, de bien común.

 

7. ¿Cómo se financia el carnaval? ¿Quiénes participan en la producción del mismo?

 

Con autogestión, apoyo y voluntariado de decenas de personas que hacemos parte del Comité Ambiental. En esta organización no hay una sola persona a la cual le paguen por el apoyo que brinda a la Marcha Carnaval. Los afiches, volantes, transportes y alimentos se garantizan gracias a la venta de bonos de apoyo económico y a los aportes de algunos sindicatos, universidades y grupos de personas que solidariamente respaldan estos procesos. La cooperativa de transportadores de Cajamarca, por ejemplo, en la VI Marcha carnaval ayudó a movilizar cerca de 1200 personas de este municipio a Ibagué. De igual manera existen otros sectores sociales que responden por su propios gastos de trasporte y alimentación.

 

 

8. ¿Cuáles han sido los logros del carnaval a nivel político, académico y cultural?

 

A nivel social hemos demostrado que el inconformismo es generalizado. Se ha ganado conciencia, conocimiento, capacidad de movilización y articulación.

 

Se ha comprendido que los ríos de leche y miel que prometen estas empresas son una incoherencia absoluta que se implementa con el fin de comprar conciencias. Las comunidades han aprendido y conocen que los municipios mineros tienen peores indicadores sociales y de calidad de vida que los municipios no mineros. Han entendido que la minería verde, no es más que un mal chiste y el desarrollo regional-nacional a través de estos proyectos, una mentira más.

 

Estas movilizaciones han logrado fortalecer la indignación tolimense. La Universidad del Tolima viene manifiesta a través de su comunidad universitaria su rechazo a La Colosa. El festival folclórico, las actividades culturales del conservatorio del Tolima y el alumbrado navideño han rechazado los recursos económicos de la Anglogold por solicitud de la comunidad. Existe un rechazo manifiesto y generalizado a la presencia de esta empresa en la vida de los tolimenses.

 

9. ¿Cuál es el sentido político del carnaval?

 

Tenemos claro que el gobierno nacional actúa en contra del sentir, querer y pensar de su gente. Actúa en favor de intereses foráneos, de empresas mineras y petroleras. Nos impone un modelo de desarrollo que desconoce la Ley colombiana y los mecanismos de participación ciudadanos. Desde este marco hemos venido insistiendo que la ciudadanía tolimense tiene el reto de fortalecer la esperanza de una país a la altura de nuestros sueños, de construir una región pensada por las propias comunidades en función de sus necesidades y proyectos colectivos, que logre hacer de su riqueza paisajística, cultural y natural, el soporte de mejoramiento de la calidad de vida de todos los tolimenses, colombianos y habitantes del mundo.

 

Somos conscientes que sólo la respuesta organizada desde las comunidades es la que va a permitir detener el modelo de despojo de los territorios, saqueo de bienes comunes y barbarie ambiental que se impone de manera dictatorial y antidemocrática desde el gobierno nacional. Nosotros creemos que es necesario restaurar la ética y la moral del pueblo colombiano. Estamos firmemente comprometidos con la defensa de la Vida en todas sus manifestaciones, con la implementación de procesos incluyentes, alegres, creativos y académicos que nos permitan detener la cultura de muerte y las propuestas de guerra entre los seres humanos y la naturaleza. Vamos por un modelo social que persiga y promueva el Buen Vivir, el Buen Beber, el Buen Comer, el Buen Dormir, el Buen Saber como base para el Buen Gobierno que manda obedeciendo las exigencias y clamores de su gente.

 

Más allá de rechazar la imposición unilateral del proyecto La Colosa por parte del Gobierno Central, lo que hacemos es defender la vocación agropecuaria del Tolima, la soberanía alimentaria regional, junto a sus dinámicas identitarias y socioculturales.

 

Hemos venido insistiendo en la necesidad de integrarle al discurso de la resistencia ambiental el discurso de las alternativas concretas. Desde este punto consideramos que el tema del turismo rural puede ser una posibilidad importante para nuestra región y país. Recordemos brevemente que Colombia en términos biológicos es el país con mayor biodiversidad por kilometro cuadrado, una región que en términos ecoturísticos y culturales tiene un potencial significativo. Proponemos que en lugar de acabar con nuestros ecosistemas, biodiversidad asociada, alto endemismo, concentración de especies, paisaje y cultura, producto de las actividades mineras a cielo abierto, deberíamos aprovechar todo este potencial para comenzar a construir modelos productivos con las comunidades indígenas y campesinas con el objeto de promover un desarrollo de largo plazo y propio que respete los derechos de las comunidades y la naturaleza.

 

 

10. ¿Por qué manifestarse por medio de una Marcha Carnaval?

 

Nosotros creemos que la cultura de muerte, el despojo y el saqueo que traen los proyectos mineros deben enfrentarse con cultura de vida, con discursos positivos, llenos de alegría, incluyentes y creativos. Hemos asumido un actuar desde la Noviolencia como método de trabajo y articulación de todo el movimiento. Estas acciones han permitido blindar la movilización social de los discursos y practicas de estigmatización, señalamiento y criminalización que permanentemente enarbolan algunos medios de comunicación cooptados, funcionarios corruptos y algunos representantes de los organismos de seguridad del estado contra el derecho legitimo y constitucional a la protesta.

 

La Marcha Carnaval seguramente es uno de los escenarios de defensa territorial más importantes que tenemos, sin embargo no nos podemos quedar solo en la movilización callejera. Desde hace cerca de 4 años, el Comité Ambiental en Defensa de la Vida del Tolima ha venido implementando múltiples acciones de defensa del agua, la vida y el territorio. Se han desarrollado foros, seminarios, encuentros, jornadas culturales, conservatorios, vigilias, plantones, las seis marchas carnaval y ahora ultimo se ha venido trabajando el tema de la consulta popular como un mecanismo de participación idóneo para la defensa del derecho colectivo a un ambiente sano, tal como lo demostraron las diversas comunidades y sectores del municipio de Piedras.